El atentado contra el senador y precandidato presidencial colombiano Miguel Uribe Turbay ha tenido repercusiones más allá de las fronteras nacionales.
La comunidad internacional ha comenzado a reaccionar con preocupación ante el deterioro del clima político en Colombia. Entre las voces más contundentes se encuentra la de Marco Rubio, el 72º Secretario de Estado de Estados Unidos bajo el liderazgo de Donald Trump, quien emitió un pronunciamiento enérgico condenando el ataque y cuestionando el discurso del presidente Gustavo Petro.
Rubio, figura influyente del Partido Republicano y conocido por su seguimiento a los asuntos latinoamericanos, no dudó en vincular el atentado con lo que calificó como una “retórica violenta e incendiaria” proveniente del alto gobierno colombiano.
“Una amenaza directa a la democracia”
En su declaración oficial, Rubio expresó: “Estados Unidos condena con la mayor firmeza el intento de asesinato del senador Miguel Uribe. Esto constituye una amenaza directa a la democracia y es resultado de la violenta retórica izquierdista proveniente de las más altas esferas del gobierno colombiano.”
El exfuncionario recordó los avances significativos que Colombia ha logrado durante las últimas décadas en materia de seguridad, fortalecimiento institucional y democracia, asegurando que el país no puede permitirse retroceder a épocas marcadas por la violencia política.
“Tras haber presenciado de primera mano el progreso de Colombia en las últimas décadas para consolidar la seguridad y la democracia, no puede permitirse volver a tiempos oscuros de violencia política.”
Crítica directa a Petro
Rubio fue más allá al pedir públicamente al presidente Gustavo Petro que modere su discurso y asuma responsabilidad en la protección de figuras públicas y opositores políticos.
“El presidente Petro debe moderar su discurso incendiario y proteger a los funcionarios colombianos.”
Este señalamiento internacional se suma a los comentarios nacionales de figuras como el expresidente Andrés Pastrana, quien también culpó a Petro por “sembrar odio” y crear un ambiente propicio para la violencia política.
Solidaridad con Miguel Uribe y llamado a la justicia
Rubio también expresó su apoyo a la familia del senador Uribe y a sus seguidores:
“Nos solidarizamos con la familia, los seres queridos y quienes apoyan a Miguel. Los responsables de este ataque deben comparecer ante la justicia.”
El mensaje de Rubio resuena fuertemente en Washington, donde los lazos diplomáticos entre Colombia y Estados Unidos han sido históricamente estratégicos, y donde la estabilidad democrática de la región continúa siendo una prioridad.
El atentado ocurrió durante un acto político en la localidad bogotana de Fontibón, en el que Miguel Uribe participaba como parte de su campaña presidencial con el partido de oposición Centro Democrático. Aunque aún se investiga la autoría intelectual, ya fue capturado el presunto atacante, lo que permitió al gobierno y a las autoridades iniciar una investigación a fondo.
Este hecho se suma a un contexto cada vez más polarizado en Colombia, donde la confrontación verbal entre el gobierno y la oposición ha escalado en tono y consecuencias. El llamado internacional a la moderación y al respeto por la vida política no solo refuerza la necesidad de esclarecer el caso, sino que también pone presión sobre el presidente Petro en el plano internacional.
