
Con el paso de los días se develan los primeros avances en la investigación del atentado contra el senador y candidato presidencial, Miguel Uribe Turbay. Los videos de cámaras de seguridad aledaños al parque El Golfito, ubicado en el barrio Modelia, lugar en el que fue perpetrado el atentado sicarial, permitieron a las autoridades establecer preliminarmente que el atacante, un menor de 15 años de edad, no actuó solo.
Gracias a ese seguimiento pericial se pudo determinar que el atacante llegó a unas pocas cuadras del lugar de los hechos a bordo de una motocicleta, como pasajero. Después de descender del vehículo, el victimario se quitó el casco, se puso una gorra y procedió a hacer una llamada telefónica, todo en presencia del conductor de la moto, de quien hasta ahora se desconoce su identidad.
La revelación de los videos dio sus primeros frutos este jueves, llevando al conductor de la motocicleta a presentarse voluntariamente a la Dirección Seccional de Fiscalías para entregar su declaración frente a los hechos.
En la diligencia, el hombre habría asegurado que fue contratado por el joven atacante a través de una aplicación que ofrece servicios de transporte. Sin embargo, se desconoce por qué, si no conocía al supuesto pasajero, no solo descendió de la motocicleta y conversó brevemente con el joven, sino que lo acompañó mientras este realizaba una llamada celular.
Horas más tarde, otro hombre, presuntamente vinculado al caso, también acudió de forma voluntaria al Búnker de la Fiscalía, tras conocerse los videos recopilados por los investigadores y revelados por Noticias Caracol.
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Aún faltan muchas piezas para armar el rompecabezas de este atentado. Los investigadores avanzan en la recopilación de videos, testimonios, pruebas e informes forenses que permitan establecer la identidad de los autores intelectuales de este execrable hecho.
Mientras tanto, el joven que disparó contra Miguel Uribe permanece en el Búnker de la Fiscalía, bajo una medida de internamiento preventivo ordenada por un juez penal para adolescentes, luego de haber sido imputado por los delitos de homicidio en grado de tentativa y fabricación, tráfico, porte o tenencia de armas de fuego, accesorios, partes o municiones, cargos que no aceptó.