
Con la autenticidad que la caracteriza, Érika Zapata, corresponsal de Noticias Caracol, compartió uno de los episodios más vulnerables de su vida durante una emotiva entrevista con el programa Lo Sé Todo. Por primera vez, habló públicamente sobre una dolorosa ruptura amorosa que no solo la marcó profundamente, sino que también la empujó a una valiente reflexión sobre el amor, el desamor y el valor de ser uno mismo.
La periodista, conmovida y visiblemente emocionada, recordó con franqueza cómo fue su primera relación sentimental, una etapa que vivió con ilusión, pero que terminó en desilusión.
“Había conseguido mi primer novio y resulta que me estaba engañando con otra persona”, confesó sin rodeos. El descubrimiento no solo la devastó emocionalmente, sino que la convirtió en blanco de burlas y comentarios malintencionados en redes sociales.
Muchos recuerdan una nota en televisión en la que Érika aparece llorando. Ahora, con perspectiva y madurez, reveló lo que realmente ocurrió detrás de esas lágrimas.
“Me puse a llorar porque no estaba preparada para que se burlaran de mí. Yo soy tan honesta en mis emociones, que cuando eso me pasó, no supe cómo actuar”, explicó. En ese momento, se sintió desarmada y vulnerable ante una audiencia que, en vez de empatía, muchas veces responde con juicio o sarcasmo.
“¿Uno cómo responde cuando se burlan de ti? ¿Qué sigue después de eso?”, se preguntó. La respuesta, aunque no fue inmediata, llegó con el paso del tiempo: sanar.
“Afortunadamente, el tiempo lo cura todo. Va sanando, y con los días uno va pensando mejor las cosas”, aseguró, dejando ver que la resiliencia también se aprende.
Pese al dolor, Érika no niega que vivió su relación con intensidad y ternura.
“Me metí en una película impresionante. Me salían corazones por las orejas cuando iba a todas partes. Fue bonito, me gustaba alguien, estaba entusiasmada”, relató con una mezcla de nostalgia y aprendizaje. Esa entrega emocional la hizo vulnerable, pero también la llevó a conocerse mejor.
Hoy, asegura que aunque está en proceso de recuperación emocional, no ha perdido la fe en el amor.
“Creo que me estoy recuperando, pero me voy a quedar recuperándome tranquila. Ahora sí voy a esperar a la persona adecuada”, afirmó con serenidad.
Entre el amor propio y la exposición pública
Ser una figura reconocida también ha influido en sus experiencias sentimentales. “El reconocimiento es bueno, pero te pone en una posición complicada, porque se acerca gente que uno no sabe con qué intenciones lo hace. A veces piensan que uno tiene plata o que es famoso, y no siempre es así”, señaló.
En medio de risas, dijo que no quiere quedarse “solterona”, pero dejó claro que no se conformará con menos de lo que merece. “Le pido a Dios que me mande una pareja que no se avergüence de mí, que no le dé pena salir conmigo por ser una figura pública. Que me quiera de verdad, sin apariencias”, expresó con honestidad.
Érika se describió como una mujer honesta, fiel, inteligente y sin dobleces. A pesar de lo vivido, se mantiene firme en sus valores: “No soy interesada, no soy infiel, no engaño a la persona con la que estoy. Me considero una buena mujer.”