Lo que sería un viaje para acompañar al Deportivo Independiente Medellín en su juego contra Boca Juniors en Buenos Aires, se convirtió en una película de terror para 13 hinchas del 'poderoso de la montaña' en medio de la pandemia del Coronavirus.
El pasado 10 de marzo se jugó este partido y desde entonces 13 hinchas colombianos no han podido salir de Argentina y buscan ser repatriados en un vuelo humanitario.
"Estuvimos cinco días haciendo turismo y emprendimos el regreso a Colombia, pero nos encontramos con la frontera cerrada con Bolivia el pasado 17 de marzo. Pasamos dos días en la calle, todo estaba cerrado por la cuarentena en La Quiaca", comentó Crisitan Ramírez a este medio de comunicación.
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Ramírez comentó que fueron días que no se le desean a nadie, puesto que en La Quiaca las autoridades empezaron a no hacerse cargo de este asunto y tampoco les brindaron ayudas humanitarias en medio del viacrucis para pasar la noche y sentirse seguros.
En este momento las autoridades argentinas obligaron a los hinchas a pasar la frontera contra Bolivia y salir de este país.
"Nos tocó escondernos en unas veredas entre la frontera entre Bolivia y Argentina porque ningún país quería abrirnos la frontera", aseveró Ramírez sobre el trato del que fueron víctimas los hinchas del DIM.
La autoridad contra nosotros...
Ramírez confesó que uno de los peores momentos fue cuando la germandería (autoridad argentina) los calificó como ilegales, aún sabiendo que en los pasaportes tenían el sello de poder estar en Argentina por 90 días.
"Un periodista nos ayudó y nos llevó comida, pero hizo una gestión y nos llevó a una escuelita en La Quiaca que era un refugio en medio de esta situación, pero aquí parecíamos presos, nos requisaban 2 o 3 veces por día, eramos vigilados las 24 horas y solo nos dejaban salir a una persona por día porque ya no nos daban comida", sentenció el hincha colombiano.
Ramírez confesó que hubo comunicación con concejales y miembros de la cancillería colombiana, e inclusive el mismo gerente del DIM ha estado siguiendo la travesía de los hinchas apasionados por el fútbol, pero todo llegó después de los tratos indignos y la indiferencia de las autoridades.
Al término de un aislamiento en La Quiaca, los hinchas fueron trasladados de nuevo a Buenos Aires con el objetivo de repatriarlos.
Sin embargo, antes de salir a Buenos Aires sufrieron tratos indignos como requisas con golpes. "Nos dijeron quiténse la ropa, y uno normalmente se quita la camiseta y el pantalón, por cada prenda nos daban un golpe con bolillos en la espalda. Así lo hicieron con todos los colombianos".
Al llegar a la capital argentina el trato fue diferente, un cambio del cielo a la tierra, gracias a la gestión del cónsul. Los hinchas tienen hospedaje en hoteles y las comidas diarias.
Los hinchas que son liderados Cristián Ramírez esperan que toda está situación mejore, además que todos los compañeros que están en otros hoteles tengan las comidas diarias.
Sin duda es una de las situaciones que nadie había imaginado y que el fútbol y sus hinchas han sufrido las consecuencias en medio de las medidas que cada país ha tomado para evitar la propagación de casos de coronavirus.
