Entre los cientos de curiosos que aguardaban la llegada del presidente Juan Manuel Santos a la isla de San Andrés este viernes para reunirse con las autoridades locales, estaba un grupo que no sobrepasaba las cuarenta personas, dispuesto a encararlo.
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Al paso de la caravana presidencial, gritaban “fuera presidente”. Sin embargo, el jefe de Estado no quiso detenerse a saludar a las personas que salen a recibirlo en sus recorridos, como habitualmente lo hace. Una vez entró a la sede de la gobernación de San Andrés, los gritos de estas personas se escuchaban con más fuerza.
“Salga presidente a dar la cara”, “vámonos para Nicaragua”, viva “Ortega”, gritaban estos raizales refiriéndose a Daniel Ortega, el presidente de Nicaragua.
El viaje del primer mandatario se dio un día después que la Corte Internacional de Justicia, CIJ determinara que sí es competente para conocer la demanda con las nuevas pretensiones expansionistas.
Estos raizales enfurecidos con el presidente de la República hacen parte de una congregación religiosa que se llama Amen, y su líder espiritual Raymond Howard explicó a medios presentes que la rabia de sus fieles radica en que el jefe del Ejecutivo los ha dejado solos en el litigio contra Nicaragua y no ha querido dialogar con los raizales.
De hecho, al ver las cámaras, los integrantes de esta secta religiosa botaron sus cédulas al piso y las pisotearon, mientras pregonaban a los cuatro vientos “queremos ser nicaragüenses, viva Ortega, o no siga entregando al país”.
Después de salir de la reunión en el Coral Palace Juan Manuel Santos explicó que un partido político del cual no quiso dar el nombre, estaba detrás de las protestas en su contra en la isla. “Lo que me dicen es que un delegado de un partido político estuvo aquí, organizando esa reunión. Un partido político y no quiero mencionarlo”, dijo.
El presidente Santos reunido con autoridades locales de San Andrés.
Según señaló Santos Calderón, el grupo que hizo las manifestaciones en la isla, no representa el pensar de todos los sanandresanos. “Me dicen que este grupo no representa a la totalidad de los raizales. Es una minoría a la que se les invitó a discutir pero no quiso. Quieren protestar. ¡Griten todo lo que quieran! Respetamos el derecho a la protesta”.
Sin embargo, al llegar a Bogotá le bajó el volumen a la controversia y señaló que en futuros acercamientos y diálogos que tenga con el gobierno nicaragüense, incluirá a los raizales.
De todas maneras los autores de la protesta señalaron que seguirán protestando en contra del gobierno colombiano hasta que no vean políticas de inclusión en la isla.
Según cálculos de las autoridades locales, la población en el archipiélago de San Andrés ya pasó los cien mil habitantes, de los cuales 35 cinco mil son raizales, o nativos de la isla. Después del fallo del 2012, en el que Nicaragua obtuvo 75 kilómetros de mar que le pertenecían a Colombia, la mayoría de los pescadores de San Andrés se quejaron porque ya no iban a poder ejercer su oficio en mar adentro.
En ese entonces el gobierno nacional les prometió una serie de ayudas que al final, según denunciaron los mismos pobladores no llegaron o se implementaron a medias.
El presidente Santos reunido con autoridades locales de San Andrés.
Según señaló Santos Calderón, el grupo que hizo las manifestaciones en la isla, no representa el pensar de todos los sanandresanos. “Me dicen que este grupo no representa a la totalidad de los raizales. Es una minoría a la que se les invitó a discutir pero no quiso. Quieren protestar. ¡Griten todo lo que quieran! Respetamos el derecho a la protesta”.
Sin embargo, al llegar a Bogotá le bajó el volumen a la controversia y señaló que en futuros acercamientos y diálogos que tenga con el gobierno nicaragüense, incluirá a los raizales.
De todas maneras los autores de la protesta señalaron que seguirán protestando en contra del gobierno colombiano hasta que no vean políticas de inclusión en la isla.
Según cálculos de las autoridades locales, la población en el archipiélago de San Andrés ya pasó los cien mil habitantes, de los cuales 35 cinco mil son raizales, o nativos de la isla. Después del fallo del 2012, en el que Nicaragua obtuvo 75 kilómetros de mar que le pertenecían a Colombia, la mayoría de los pescadores de San Andrés se quejaron porque ya no iban a poder ejercer su oficio en mar adentro.
En ese entonces el gobierno nacional les prometió una serie de ayudas que al final, según denunciaron los mismos pobladores no llegaron o se implementaron a medias.
