Por el camino que va, el tercer canal va a ser el primer lunar de la administración Santos.
Si hay algo en donde quedó evidente que para el gobierno de Uribe el derecho es apenas una herramienta de la que se puede prescindir según la conveniencia, fue en el tema de la adjudicación del tercer canal. Un proceso en el que sus delegados en la CNTV no tuvieron ninguna verguenza en torcerle el pescuezo a la normatividad vigente para intentar sacarlo a como diera lugar antes de que terminara el gobierno de su jefe. Un trámite que dio toda la papaya para que Caracol y RCN, aprovecharan al máximo los errores de los comisionados del gobierno para mediatizar el debate y terminar defendiendo el duopolio informativo en televisión.
No hubo sonrojo en la oficina jurídica de Palacio de la administración anterior al momento de recomendarle al presidente que nombrara un comisionado ad hoc y completara la mayoría calificada que requería para adjudicar el tercer canal en medio de un proceso con muestras de falta de garantías a la pluralidad de oferentes y en el que los actos administrativos de la CNTV no fueron precisamente los más ajustados a derecho.
Al haberse vencido el periodo de un comisionado elegido democráticamente y aparecer la Procuraduría con una nueva tesis según la cual este debería dejar el cargo sin que se hubiera surtido el proceso para llenar esa vacante, el gobierno de Uribe nombró un comisionado de sus entrañas, sin importarle que por ser de elección democrática no era el ejecutivo el indicado para nombrar reemplazo ni definitivo ni temporal.
Claro que de un gobierno que se inventó y se reinventó una reelección harto cuestionada en materia constitucional se podía esperar mucho en desconocimiento del derecho. Pero que el gobierno de los nuevos mejores amigos, de las distancias con ciertos procederes y actitudes como el de le rompo la cara marica y de las diferencias de concepto en temas de democracia, fuera a repetir la historia en el tema del tercer canal, casi nadie lo esperaría.
Lo cierto es que, a punta de trucos que parecen más del Ministerio anterior, se ha conducido a generar nuevamente la vacante de un comisionado que, según las propias reglas de esa cartera, hoy ya debería estar elegido. No se convocó oportunamente a elecciones y este 12 de marzo el puesto les queda libre. Si se tiene en cuenta que hoy hay una viceministra que pertenece a lo más rancio de la estirpe uribista hasta el punto que fue su comisionada en la CNTV y que renunció tan pronto ganó la comisionada que no le gusta, es fácil suponer que desde el ministerio se ha manejado este proceso electoral para que la comisionada convertida en piedra en el zapato se tenga que ir.
Como se sabe que la comisionada Zulma Casas se opuso a que se adjudicara el tercer canal si no se garantizaba la pluralidad de oferentes y si no se cumplía a cabalidad con el proceso administrativo, el Ministerio decidió dejar que se venciera su período con la clara intención de nombrar comisionado ad hoc y poder decidir libremente con mayoría gobiernista, justo en los días en que está por producirse el fallo del Consejo de Estado sobre la viabilidad del tercer canal.
Así las cosas, blanco es, gallina lo pone y frito se come. Y nuevamente, como diría Alberto Casas, tienen huevo, porque por ser más papistas que el Papa y creyendo que al presidente Santos le interesa que el tercer canal se lo entreguen a Planeta como sea, están repitiendo la historia de las embarradas, para no usar la expresión escatológica más adecuada. Y por creer que ayudan, los comisionados del gobierno anterior que quieren que el Presidente los ratifique en su cargo, y la Viceministra que tiene su agenda propia, llevaron al Ministro de las TIC a saltarse el debido proceso, a tirar por la borda las más elementales premisas de la democracia como garantizar la representación de los electores y seguramente ya le tienen nombre al reemplazo, por las vías de hecho, de la comisionada. Esto sin contar que el decreto electoral se ha sacado de la manga una fórmula matemática completamente antidemocrática para que la comisionada pierda las elecciones.
Tal vez Juan Mesa, el consejero para las comunicaciones no ha sido bien informado y de seguro el presidente Juan Manuel Santos no se ha enterado del flaco servicio que el prestan los alfiles del uribismo en esta materia. Porque si no es así, se prendió el canal y apague y vámonos y mejor dejemos los santos quietos.
El canal de la mancha
Lun, 07/03/2011 - 09:22
Por el camino que va, el tercer canal va a ser el primer lunar de la administración Santos.
Si hay algo en donde quedó evidente que para el gobierno de Uribe el derecho es apenas una her
Si hay algo en donde quedó evidente que para el gobierno de Uribe el derecho es apenas una her