Gobierno Santos en apuros

Lo que parecía ser un año con grandes expectativas para el gobierno, por lo que representa la paz para el país, se ha tornado en pesimismo. 2016 podría convertirse en el peor en sus 2 mandatos, debido a los movimientos telúricos de la economía y a errores de cálculo, a los que ya nos tienen acostumbrados el Presidente del tal paro no existe y su equipo, además de la poca sintonía con los ciudadanos, que no terminan de aprobar su gestión, con un escaso 40% de aceptación. Solo le está apostando al proceso de paz, descuidando otros sectores que jalonan el desarrollo y mejoran la calidad de vida de la gente. ¿Por qué hay tantos nubarrones en el horizonte? simplemente la economía global está dando giros, que ni los mismos economistas se explican, por la caída exorbitante del petróleo, en el punto más bajo desde 2004, 28 dólares por barril y según los especialistas puede caer a 15, un caos para las economías que dependen del crudo. Colombia está blindada, dice alegremente Mauricio Cárdenas, catalogado como el mejor ministro de hacienda del mundo, por no sé qué revista, como si eso le interesara al colombiano promedio ¿blindada de qué? Con un dólar disparado, que no controla nadie y afectando la inflación; como si fuera poco, subastan activos del Estado, con un solo oferente,  ISAGEN generaba un buen rendimiento, pero había que venderla para tapar el hueco fiscal por todo el derroche de años anteriores, y lo peor, con la sombra de Tony Blair, quien al parecer tiene intereses en la firma canadiense, dizque para apostarle a las vías 4G, que deberían ser financiadas a través de alianzas con inversionistas internacionales, pero lo harán con peajes altísimos, además preparan una reforma tributaria que incluye subir el IVA al 19% para solventar la crisis y que los colombianos terminen pagando los platos rotos, hasta los útiles escolares quieren gravar. De ñapa, la crisis energética desatendida, nos tiene al borde de un racionamiento; Electricaribe haciendo de las suyas sin que nada pase; más el problema del gas, que se lo entregamos a Venezuela y no lo quiere devolver, no tenemos quien reclame ¡Estamos jodidos!; mientras el petróleo continúa en caída libre, la gasolina en Colombia no baja. Para completar el paquito de Condorito, la firma del acuerdo en La Habana que se esperaba para marzo, por las declaraciones de Iván Márquez, no tiene fecha en el calendario, se extenderá de acuerdo al manejo y a las conveniencias del grupo terrorista. Todas estas variables pueden terminar en una tormenta perfecta para acabar con la poca popularidad de Santos, preciso cuando más necesita un liderazgo fuerte para sacar adelante un plebiscito que cuesta 350,000 millones de pesos y no le gusta a muchos colombianos, por ser una piñata de impunidad, como lo catalogó la ONG Human Rights Watch. Sería el derrumbe del castillo de naipes y por ende de la esperanza de paz de un país sensible, cuando le tocan el bolsillo, que este gobierno subestima y maltrata cada vez que quiere. @JACOBOSOLANOC