-Anduve mucho tiempo desordenado, admite Marcelo Cezán, como lo conoce el país su nombre de pila es Edgar Alfredo Gómez- y aunque niega que ejerza hoy como un pastor cristiano, la verdad es que está haciendo el curso.
Edgar Hozzman, un viejo analista de los medios, puso el grito en el cielo y exclamó estupefacto: -Marcelo Cezán se volvió pastor, según se rumora en Sony. Y se refirió con desprecio al que consideró su único éxito musical, Nueve semanas y media, que se escuchó no más que ese lapso, después de lo cual el artista siguió de tumbo en tumbo, como mal cantante y pésimo actor.
Es una percepción. Otros piensan que Cezán no logró los éxitos que le auguraban su triunfo tempranero y que todavía tiene tiempo (después de la larga rumba) para que le demuestre al país y se pruebe él mismo- que tiene condiciones excepciones como artista polifacético.
Su vida ha cambiado mucho. Ha mejorado en muchas cosas, dice sonriendo. Estaba un poquito desordenado, es cierto. Había caído en un hueco emocional profundo, le dijo a otro medio hace poco, tras confesar sus depresiones al ser despedido del programa Bravísimo. Se dedicó a la bohemia, a disfrutar su apartamento de soltero en La Calera.
La cantante Adriana Lucía le mostró el camino, lo llevó a la iglesia El lugar de su presencia, en el barrio La Castellana en Bogotá, dirigida por un pastor australiano.
Reciben formación teológica fuerte, en un proceso de año y medio. Entre semana transcurre un grupo de conexión”. Tratan diversos temas de la vida práctica, que ordena la vida, que ayuda a enfrentar los cambios y el mundo. En diciembre cumple siete años en la iglesia.
Marcelo Cezán admite que fue católico, metafísico y hasta rastafari, un movimiento espiritual que considera que Haile Selassie la tercera reencarnación de Jah (abreviación del nombre de YHWH ).
-Aquí encontré algo chévere, práctico, especial para jóvenes, comenta emocionado, tras volver por caminos de tranquilidad profesional, sentimental y económica.
La conversación que tuvimos en la mañana no pudo ser más larga porque Marcelo dice vivir en la montaña. Y todos sabemos que feliz. Se acaba de casar con Michelle Gutty.
