Quién lo creyera, que después de más de cincuenta años de matarnos terminara todo en una pelea de gallos por el si o por el no, de un acuerdo que abre la posibilidad de comenzar a construir definitivamente la Paz en el país.
Acuerdos que todos sabemos puede no ser perfecto pero que tuvo a mu has personas dando lo mejor de sí, para abarcar todos los temas motivos de conflicto.
Acuerdo que de una u otra manera permite que dejemos de matarnos, que se entreguen las armas, que se pida perdón desde todos los bandos, en fin, que nos permita soñar con una real actitud de dejar la guerra, para entre todos construir la Paz.
Pero no, nos enfrascaron en lo de siempre, dividir para politiquear y figurar. Siguen utilizando la muerte entre colombianos para imponer sus ideas, que son de ellos pero que no estamos cientos de colombianos de acuerdo con ellas, porque pensamos que definitivamente hay que dejar de matarnos.
Se les olvida incluso el grado de culpabilidad que tienen en el conflicto, sus actos que llevaron a esta confrontación y la manera equivocada como manejaron desde sus gobiernos lo público.
Hoy como ayer se juegan su prestigio político con el fracaso de la posibilidad de parar estos actos demenciales de decadas de violencia.
Igual que en el pasado juegan al fracaso de un proceso de paz para figurar e imponer sus ideas a la fuerza, a sabiendas que esto no funciona.
Cansados de tanta violencia, de tantos actos atroces, de tantas violaciones a los Derechos Humanos, solo pedimos que se pare la guerra.
Si estos acuerdos ya nos han demostrado a través de las cifras que comenzamos a dejar de matarnos, porque no decirle SI al acuerdo y esperar a que con los actos, se construya un nuevo país incluyente, respetuoso y con justicia social.
Cual el afán de no permitir el cambio para seguir en lo mismo, sacrificando vidas humanas a diario y que la pobreza, la miseria se apoderen de hogares colombianos como viene sucediendo.
Fácil hablar de guerra cuando los muertos los ponen otros y cuando la riqueza queda en manos de unos pocos.
Prefiero un acuerdo con deficiencias, que continuar una guerra con políticos corruptos diciéndonos que debemos hacer y, a través de las armas metiendo miedo por doquier.
Votaré SI.
