El nuevo milenio nos tiene acostumbrados a sentir el aroma cafetero en el fútbol argentino. El legado que dejaron en Boca Juniors al final de los 90 e inicios del 2000 abrió una puerta grande para los colombianos: Córdoba, Bermúdez y Serna. En la otra vereda, River Plate, también había presencia nacional, Juan Pablo Ángel y Mario Alberto Yepes.
Desde allí, muchos colombianos pasaron por el balompié gaucho, con suerte dispar. En equipos más grandes y en otros más pequeños, siempre hubo al menos un colombiano destacado en las últimas temporadas en Argentina. A las puertas de un nuevo torneo muchas son las expectativas de la nueva legión que intentará mantener la jerarquía.
Una apuesta millonaria
Llevar a Teófilo Gutiérrez no fue nada sencillo. Para muchos fue la “vedette” de este mercado de pases argentino, pero por 4 millones de dólares, pudo ponerse la camiseta que siempre dijo amar. “Desde niño siempre miraba a River porque mi padre es hincha y me invitaba a ver los partidos. La camiseta era distinta a todas, me llamaba la atención la banda roja. Para mí era especial”, declaró Teo en una rueda de prensa.
El delantero, que ha pasado del amor al odio en su paso por Argentina, no estará solo. Ramón Díaz, el entrenador que tanto insistió por la llegada de Teo, también fijó sus ojos en Carlos Carbonero. Tras haber logrado la hazaña del título local con Arsenal de Sarandí, el volante ex Atlético Huila desistió de irse a Europa, para quedarse en River.
Otro al que ya daban como ausencia, pero que al final se queda, es Eder Álvarez Balanta. El presidente de River viajó a Europa con la consigna de venderlo. Sin embargo, el alto costo establecido para el que quisiera hacerse con el “Káiser Negro” (se hablaba de 14 millones de euros), espantó a los interesados y por el momento Eder se queda.
No lo desvela marcharse, incluso siente que al tener a dos paisanos con él, es una gran oportunidad. En exclusiva con Kien&Ke, Balanta no esconde la admiración que tiene por Teófilo Gutiérrez: “Es un delantero muy completo, ya que así como tiene potencia en el área, también es un jugador que puede bajar a ayudar. Tiene mucha técnica y es muy inteligente”.
La clave de esta vanguardia colombiana en River Plate es la confianza depositada por Ramón Díaz en los tres jugadores. El “Pelado” pidió expresamente a Teo para volverlo goleador de Argentina, le dijo a Carbonero que jugar en River Plate es más prestigioso que un equipo chico de Italia y alguna vez comparó a Álvarez Balanta con uno de los mejores defensores de la historia, Daniel Passarella. Justamente para el zaguero, Ramón es la clave de este renovado River. “Predispuso a la gente de otra manera. Ganó todo aquí y la gente espera que en este ciclo también todo le salga muy bien”, finalizó Balanta.
El futuro del “Perla Negra”
Duván Zapata ha madurado. Aquel jugador que alternaba la cal y la arena cuando estuvo en América de Cali, hoy es una estrella cotizada en el mercado argentino. Luego de su coqueteo con la Premier League, y su fallido traspaso a Sassuolo, Estudiantes de la Plata quiere que se quede. Con una cotización de alrededor de siete millones de dólares, el equipo “Pincharrata” cree que puede duplicar esa cifra, si se queda seis meses más.
Aún así no es completamente segura la estadía de Duván. Cuando las aguas estaban calmas en La Plata, Zapata desató la tormenta. “Nos deben dinero a mí y a mis compañeros y no veo predisposición para solucionarlo. El presidente miente y me deben mucha plata, no me sirve que me mejoren el contrato sino me pagan lo que me deben”, explotó el delantero en 221 Radio. Mientras en el clan Duván se deshoja la margarita, la “Perla Negra” iniciará el torneo para el León.
Es ahora o nunca
Desde que Jonathan Copete dejó Colombia, muchas esperanzas se han depositado en él. La expectativa suscitada tras entregarle el título a Independiente Santa Fe era mucha, pero no todas fueron risas para el delantero en Vélez Sarsfield. Ha alternado buenas con malas, siendo suplente en la mayoría de los casos. Incluso ha sido foco de la prensa, cuando por cosas del fútbol, erró un gol insólito.
Pero en este verano la ilusión es otra. Una excelente pretemporada ha puesto a dudar al entrenador Ricardo Gareca si alinear a Jonathan de titular o no. Por delante tiene a uno que regresó para volver al nivel que algún día tuvo: Mauro Zarate. Es el momento que Copete demuestre que puede dar el salto de calidad, de lo contrario su salida de Liniers podría avecinarse.
No llores por mí, Argentina
Así como algunos colombianos han llegado a la liga gaucha, otros se han marchado. Fabián Vargas estuvo a punto de llegar a Racing, pero las amenazas de los hinchas de su antiguo club, Independiente, lo hicieron desistir. Luego, el coqueteo se presentó con Rosario Central, pero al final recaló en Barcelona de Guayaquil.
La excelente temporada de Santiago Montoya Muñoz en All Boys, lo hizo emigrar a Brasil. Vasco Da Gama se fijó en él y ahora juega en Rio de Janeiro. Humberto Osorio Botello pegó el salto grande y se enroló en las filas de Valladolid de España.
Y ahora, ¿Quién llega?
La legión podría completarse con nuevos refuerzos. Los equipos que iniciarán la temporada argentina han inscrito a varios compatriotas que tendrán oportunidad de negociar una semana más con la intención de contratarlos. El que mayor admiración causó fue el nombre de Juan Daniel Roa, lateral de Independiente Santa Fe, que estaría a un paso de llegar a Boca Juniors.
Otro nombre que despierta alto interés es Giovani Moreno. El ‘Flaco’ podría recalar en Arsenal de Sarandí, o si lo prefiere, llegar a Rosario Central, donde lo espera con los brazos abiertos un exentrenador: Miguel Ángel Russo. Dejando las lejanas tierras arábigas, Jairo Palomino tiene todo acordado con Racing, mientras que el humilde Olimpo ha atado a Javier Reyna, mientras que José Valencia prefirió quedarse en la MLS. El balón empieza a rodar y tiene aroma a café, ¿Te tomas uno mientras bailas tango?
Colombia, a la reconquista de la Patagonia
Sáb, 03/08/2013 - 12:01
El nuevo milenio nos tiene acostumbrados a sentir el aroma cafetero en el fútbol argentino. El legado que dejaron en Boca Juniors al final de los 90 e inicios del 2000 abrió una puerta grande para l