Todo un revuelo se armó en las puertas de la Casa de Nariño cuando más de 40 congresistas se agolparon para solicitar una reunión con el presidente Iván Duque, con el fin de discutir las medidas y alternativas para solucionar el paro indígena en el Cauca. Sin embargo, la mayoría de ellos no fue recibida por el mandatario.
Cerca de las 3:00 pm. de este 27 de marzo, varios senadores y representantes levantaron la plenaria del Congreso para intentar, a través de una llegada masiva al Palacio de Nariño, ser recibidos por el presidente.
"Hemos venido no a debatir o decidir, sino a presentar iniciativas de salidas y soluciones pero no nos escuchan. Intentamos hacer consenso sobre un asunto metodológico que planteó el doctor Jaime Amín, de que entraran solo cuatro funcionarios de la delegación", afirmó el senador Feliciano Valencia, uno de los que conformó el grupo para dialogar con el presidente. Sin embargo, no les dieron certeza de que el presidente se reuniría con ellos.
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"Ante la negativa del presidente Duque de recibir a un grupo nutrido de congresistas que nos encontramos en la Casa de Nariño hemos decidido retirarnos, presidente Duque no tiene voluntad de negociar con la minga ni encontrar una solución al conflicto que actualmente tenemos", afirmó la representante a la Cámara, Katherine Miranda.
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Algunos congresistas desistieron de su iniciativa de diálogo luego de más de tres horas esperando que el presidente aceptara recibir al grupo completo de legisladores. Después, a altas horas de la noche, una pequeña delegación ingresó al Palacio para reunirse con el primer mandatario, entre los que se encontraban representantes de Nariño como Manuel Viterbo Palchucán y Liliana Benavides, así como la senadora del Centro Democrático, Paloma Valencia y Ernesto Macías. Sin embargo, no se encontraba el senador Feliciano Valencia, uno de los mayores representantes de los indígenas y voceros de la minga en el Cauca.
El alto consejero presidencial para la política, Jaime Amín, explicó a los medios de comunicación y a la delegación, durante la aglomeración sobre la calle octava, colindante con el Palacio, que la negativa para recibir a los congresistas respondía al protocolo de audiencias presidenciales.
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"Las cosas tienen un orden y una metodología, con el mayor gusto y compromiso nosotros dedicamos un tiempo importante para hablar con una comisión de los congresistas de los diferentes partidos y bancadas que han venido a la Casa de Nariño, ese es el orden de las cosas", afirmó en la puerta de Palacio.
El presidente del Congreso, Ernesto Macías, también llegó para tratar de definir la forma en que ingresarían los parlamentarios, propuso delegaciones por departamentos afectados o una comisión que representara a los demás legisladores, pero no se llegó a un acuerdo para realizar la reunión, dado que hubo diferencias entre los congresistas para entrar por delegaciones o la totalidad del grupo, según explicó Amín.
Luego, el Alto Consejero para la Política aseguró que nunca se les negó el diálogo a los representantes pero tampoco se afirmó que fuera una reunión con el presidente Duque. Según Amín, se les habría anunciado a los congresistas que asistieron la posibilidad de ser recibidos por el mandatario "siempre y cuando ellos mismos, que estaban en un grupo numeroso de más de 50 parlamentarios, hubiesen tomado la decisión de organizarse en una comisión que iba a ser atendida en el Palacio de Nariño".
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Según el alto consejero se buscará definir una agenda para mañana jueves 28 de marzo, siempre y cuando los congresistas se organicen en una delegación que será recibida por el primer mandatario en la Casa de Nariño.
La Minga indígena ya completa más de 15 días de realización y seis de ellos han sido con una comisión de Gobierno, presidida por la Ministra del Interior Nancy Patricia Gutiérrez, pero que no ha logrado definir acuerdos sustanciales para levantar la manifestación.
Así mismo, los indígenas han pedido de manera insistente la presencia del primer mandatario, pero este se ha negado a asistir al Cauca, con el argumento de que no habrá diálogo hasta que no se levanten las vías de hecho como el bloqueo de la vía Panamericana que conecta a Popayán con Cali.
