El principal riesgo que afronta el sector cafetero en Colombia, tercer exportador mundial de café, es la violencia y la extorsión ejercida sobre los productores en zonas rurales, alertó este miércoles el gerente de la Federación Nacional de Cafeteros (FNC), Germán Alberto Bahamón.
"La preocupación del cafetero en este momento definitivamente es que se retorne la seguridad en el campo", aseguró el gerente durante la inauguración del 94 Congreso Nacional de Cafeteros, que se celebrará en Bogotá hasta el viernes.
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Violencia y extorsión en las zonas cafeteras
Según precisó Bahamón, los cafeteros en Colombia han pagado 24 billones de pesos (unos 6.434 millones de dólares) en extorsiones en los últimos 12 meses, lo que está generando "riesgos enormes" en la producción del café.
Esta amenaza, dijo, es especialmente grave en los departamentos de Nariño y Cauca, donde “las mulas de café están siendo robadas”, lo que ha llevado a que la FNC promueva la implementación de caravanas de seguridad de la fuerza pública para evitar hurtos.
Cifras récord en producción, exportaciones y renovación
A pesar de esta preocupación, Bahamón señaló que el año cafetero terminó con “una cifra muy alentadora”, ya que el sector está participando en el 1,54 % del Producto Interno Bruto (PIB), la cifra más alta de las últimas décadas.
Recordó que el país produjo 14,8 millones de sacos al cierre de 2024, la cifra “más alta de los últimos 33 años”, mientras que el valor de las exportaciones llegó a 5.500 millones de dólares.
También se alcanzaron 89.400 hectáreas de renovación cafetera, lo que supone la mayor cifra “de los últimos 13 años en la agricultura colombiana”, según el gerente del gremio cafetero.
Diversificación y resiliencia del campo colombiano
Por su parte, la ministra de Agricultura, Martha Viviana Carvajalino, destacó que la fortaleza de la agricultura en Colombia son “las familias campesinas que tienen cultivos que rotan y son diversificados”, lo que permite que, frente a crisis climáticas o económicas, los productores tengan otra alternativa como “fuerza de resiliencia”.
También aseguró que, ante la incertidumbre del sector derivada de los aranceles impuestos y luego eliminados por el Gobierno de Estados Unidos, es importante diversificar las exportaciones para que, “si un país toma una decisión unilateral”, Colombia tenga la posibilidad “de mantener sus exportaciones”.
En Colombia, el café es desde hace un siglo un cultivo emblemático, que se siembra en 23 de los 32 departamentos del país y es el producto número uno en exportaciones no mineras. Del café viven 560.000 familias, según cifras de la FNC. EFE
