Una tragedia enluta al país tras conocerse nuevos detalles sobre la muerte de tres miembros de una familia en un hotel de San Andrés Islas.
El hecho ocurrió en la madrugada del viernes 11 de julio, cuando Tito Nelson Martínez Hernández (45 años), su esposa Viviana Andrea Caro Zuluaga (42) y su hijo Kevin, de tan solo 4 años, fueron hallados sin vida en la habitación donde se hospedaban.
El impactante suceso tuvo lugar en el marco de unas vacaciones familiares que habían sido planeadas con esmero para celebrar el Día del Padre y el cumpleaños de la madre de Viviana. La familia había llegado a la isla el miércoles anterior, y se encontraban alojados en compañía de los abuelos maternos del niño, quienes ocupaban una habitación contigua en el mismo hotel.
“Fue como si estuvieran dormidos”
Según relató el padre de Viviana, fue él quien descubrió la escena desgarradora. Al no recibir respuesta a los múltiples llamados que les hizo en la mañana para comenzar el recorrido turístico planeado, decidió acudir al personal del hotel para que abrieran la habitación. Lo que vio fue estremecedor: los tres cuerpos acostados en la cama, sin signos de violencia, como si simplemente estuvieran dormidos.
“Fue terrible ver a mi hija, mi yerno y mi nieto acostaditos, como dormiditos”, contó entre lágrimas en una entrevista concedida a Caracol y EL TIEMPO.
La advertencia ignorada
Los nuevos detalles revelados por Mayerly Hurtado, hija mayor de Viviana, arrojan una luz inquietante sobre lo que podría haber sucedido. Mayerly aseguró que su madre había solicitado un cambio de habitación apenas llegaron al hotel, debido al mal estado en que se encontraba el cuarto asignado. Según ella, la habitación “olía feo”, y hay pruebas de que su madre se quejó varias veces al respecto tanto en recepción como a través de mensajes de texto.
“Hay videos de mi madre en el lobby pidiendo que le cambiaran el cuarto porque estaba en mal estado. Ya los estamos pidiendo para que las autoridades sepan lo que pasó. Nadie del hotel se ha comunicado con nosotros”, denunció Mayerly.
Además, afirmó que cuenta con chats de WhatsApp donde su madre expresaba claramente su preocupación por el olor en la habitación, lo que refuerza la sospecha de una posible fuga de gas o presencia de algún químico contaminante.
El niño no presentaba signos de intoxicación
Los exámenes forenses realizados al pequeño Kevin no arrojaron la presencia de sustancias tóxicas o venenosas. “El niño tenía el estómago limpio y no ingirió nada extraño”, indicó Mayerly, lo que ha generado aún más interrogantes sobre la causa real de la muerte de los tres integrantes de la familia.
Hasta el momento, las autoridades no han emitido un dictamen oficial sobre las causas del fallecimiento. Sin embargo, los indicios apuntan a una posible intoxicación por gases o una falla en el sistema de ventilación del hotel. La ausencia de señales de violencia o de ingesta de sustancias refuerza esta hipótesis.
“La vida de tres personas se apagó en una habitación que mi madre advirtió que estaba en mal estado. Esto no puede quedar en la impunidad”, declaró Mayerly, afectada.
Investigación en curso
La Policía Nacional y las autoridades de salud del archipiélago están adelantando la investigación correspondiente. Peritos forenses continúan con el análisis de muestras tomadas en la habitación, y se espera que los resultados sean clave para determinar si hubo negligencia por parte del hotel o si se trató de un accidente fortuito.
Este trágico caso ha conmocionado al país y plantea serias preguntas sobre los protocolos de seguridad en establecimientos turísticos. Mientras tanto, los familiares de Viviana, Tito y el pequeño Kevin esperan respuestas, justicia y, sobre todo, garantías de que tragedias como esta no vuelvan a repetirse.
