Descontraloría General

Lun, 04/02/2013 - 09:02
Hace ya varios meses en este mismo espacio menci

Hace ya varios meses en este mismo espacio mencionamos cómo la Contraloría  General  estaba perdiendo su norte fiscal para entrar en una imperdonable euforia que la hacía  remedar los vicios y peores prácticas de  sus cuestionados vigilados. Por vía de ejemplo referimos no solo el cambio de sede, nomina paralela acentuada, la vinculación de funcionarios claves sin experiencia en el área de control fiscal y vinculados sin atender a procesos de selección meritocrático ( léase concursos) que terminan insinuando un direccionamiento del control fiscal, sumado al papel marginal de los auditores calificados que son parte de la planta de personal de la entidad. Hoy, son una desafortunada realidad del ente de vigilancia superior de los recursos públicos del país.

El elefante blanco del cambio  de sede por mas de 70 mil millones La Contraloría no ha logrado explicarle al país  por qué razón (contando con locaciones propias que hoy se hallan abandonadas) tomó en arriendo la nueva sede por más de 70 mil millones de pesos en dos años – uno de los más caros del país-, en un lugar exclusivo, vale decir en un centro comercial (Gran Estación) a alguien que lo tomó en leasing, con la que el arrendador que es una firma con insuficiente capital para cubrir las mismas multas que podría generar el incumplimiento del mismo. ¿Hasta cuándo tendremos que esperar que la Auditoria General se pronuncie sobre la queja que al respecto formulamos meses atrás? Curiosamente, la señora Contralora después de denostar contra sus vecinos –esta vez– del centro de la ciudad, en el Centro Comercial Colseguros, y una vez abandonadas la anteriores  sedes,  empezó a tratar de explorar caminos  de uso para las mismas. La incomodidad para la ciudadanía es mayúscula, pues además hoy por hoy formular una queja demanda un esfuerzo adicional: el llegar al faraónico edificio donde es aún más inabordable la señora Contralora General. Mientras las entidades del Estado retornan al centro, la Contraloría huye a sectores más ajenos y distantes al ciudadano de a pie. Planta paralela: más de 500 contratistas al frente de procesos de auditoria La Contraloría General ha estado infestada de numerosos contratistas superior a los 500, muchos de los cuales además de presentar una altísima rotación –que más parecen obedecer a acuerdos políticos que a necesidades reales del servicio–, dichos contratistas, algunos sin experiencia en el área, entran directamente a dirigir auditorias. Entretanto, funcionarios de planta son relevados y colocados como asesores de las auditorias. Adicionalmente, cerca de un 30% de los funcionarios de planta competentes para las auditorias no tienen asignadas labores de auditoría y para ejercer sus funciones demandan esfuerzos, en muchos casos, complejos o inalcanzables. La perla Invías Según información recibida, los contratistas para la auditoria de infraestructura y particularmente de Invías, han participado en el lanzamiento anunciado públicamente en  dirección de la misma, sin que hayan firmado el contrato respectivo y la auditoria es liderada por contratistas. Entretanto, los funcionarios de la Contraloría cumplen un papel de meros auxiliares. Lo preocupante no es que esto como tal suceda, sino que éste sea el primer rostro de un ente llamado a vigilar y a hacer respetar los sagrados recursos públicos. Misceláneos: Visa de China a Colombia: un mes El trámite de la visa a Colombia desde China, incluso para empresarios y potenciales inversionistas y servidores públicos en misión oficial de ese país, tarda al menos un mes, mientras que hacia los Estados Unidos toma solo tres días. Ello supone varias visitas al consulado, inclusive soportando los rigores del crudo invierno, en filas a la intemperie. La visita reciente del presidente  Santos a ese lejano destino no parece reflejarse en los procedimientos consulares aún. Consejo de Estado: seguimos en espera de fallos de pérdida de investidura Seguimos esperando las decisiones en materia de pérdida de investidura en los casos del cartel de la contratación (Ivan Moreno y Germán Olano), Carlos Alberto Piedrahita (y, especialmente, Jaive Cervantes) que pese a la decisión de octubre pasado, aún no se ha desvinculado. Seguiremos llamando por este resultado semanalmente hasta que la justicia llegue. @pablobustossanc  
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