Como un final feliz, así se podría catalogar el desenlace de la historia de una yegua que fue rescatada en pésimas condiciones por la Inspección ambiental y la Secretaría de Medio Ambiente de Medellín y que fue recuperada gracias a una ardua labor de veterinarios de la Universidad CES.
Esta ejemplar fue abandonada en el barrio Blanquizal, occidente de la ciudad, luego del maltrato al que fue sometida por su antiguo dueño y producto de las largas jornadas de trabajo se encontraba al borde de la muerte por las múltiples heridas que presentaba.
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Amalia Olarte, médico veterinaria y quien decidió adoptar el ejemplar, en dialogo con Kienyke.com, manifestó que esta decisión la tomó por el gran cariño que le fue tomando al animal cuando estaba bajo su cuidado.
"Desde el momento que la rescaté yo me enamoré de ella, le cogí tanto cariño que que yo era la que estaba más pendiente en como iba evolucionando la yegua, me pareció un animal muy valiente, porque en el estado en que se encontraba las probabilidades de sobrevivir eran pocas, es por eso que decidí adoptarla", manifestó Olarte.Y añadió que el caso de este animal fue muy duro, porque ella se desplomó por desnutrición y por eso sus dueños la arrastraron por unas escaleras del barrio, lo que lo produjo ademas de las heridas, graves daños musculares. [single-related post_id="799072"] Ella comentó que al momento del rescate del animal, este estaba en precarias condiciones, tanto así que producto de los tres días que estuvo en el piso, sufrió graves laceraciones, y durante su traslado el ejemplar sufrió tres paros, por lo que pensaron que no se salvaría. Finalmente gracias a una incesable labor, los veterinarios pudieron preservar la vida de este equino y mejorar sus condiciones de vida, ya que ella cuenta con un espacio propio donde se puede recuperar plenamente, bajo al cuidado y protección de un profesional. ¡Un más que noble labor que se debe destacar!
