
El expresidente Álvaro Uribe Vélez arremetió contra el presidente Gustavo Petro luego de que este radicara una consulta popular ante el Congreso de la República, iniciativa con la que busca revivir la reforma laboral que se hundió en la Comisión Séptima del Senado.
Durante su intervención en la Plaza de Bolívar, en el marco del Día del Trabajo, Petro convocó a miles de ciudadanos para apoyar su propuesta: “Ha llegado la hora del pueblo. No hay paso atrás. Es la libertad y punto”, expresó ante los asistentes.
La iniciativa, que contempla 12 preguntas, fue oficialmente presentada ante el Congreso por el secretario general, Diego González. Sin embargo, la propuesta generó una ola de reacciones, especialmente desde los sectores de oposición.
Uribe, líder del Centro Democrático, calificó la consulta como una agresión directa a los trabajadores colombianos. En una serie de publicaciones en su cuenta de X, el exmandatario detalló lo que considera son acciones del Gobierno que afectan el empleo formal y fomentan la informalidad.
“Acción #1 contra los trabajadores: la inseguridad, el narcotráfico y el discurso oficial agresivo desmotivan la creación de empleo formal. La informalidad, que ya alcanza el 57,8 %, sigue creciendo. En el último año, el número de trabajadores informales aumentó en 952.209”, escribió.
Uribe también criticó la falta de políticas de empleo para los jóvenes. “Acción #2 contra los jóvenes trabajadores: más de 2 millones de personas han salido del país, muchos en edad de trabajar. A los jóvenes se les está condenando a migrar o vincularse a actividades ilícitas. El microtráfico los recluta y de ahí pasan a otros delitos”.
El exsenador continuó su señalamiento al mencionar los efectos de la reforma a la salud: “Acción #3: la destrucción del sistema para imponer un monopolio estatal ya priva a los trabajadores del acceso a medicamentos y servicios, que deben pagar de su bolsillo”.
Respecto a la reforma pensional, Uribe afirmó que limita las posibilidades de los jóvenes de construir una pensión digna. También criticó la paralización de proyectos de vivienda social y el aumento del costo de los arrendamientos por la creciente demanda.
Además, denunció que la disminución de la actividad minero-energética pone en riesgo los empleos mejor remunerados del país, y calificó como “insostenible” el aumento de más de 30 mil empleados en la nómina del Estado. “Es un engaño electoral a los nombrados o contratados”, concluyó.
La confrontación entre el Gobierno y la oposición sigue escalando, mientras el país debate los efectos que podría tener la consulta popular en el futuro del empleo en Colombia.