Este miércoles 21 de octubre el Ejército Nacional reportó la destrucción de un laboratorio de cocaína en Carmen de Viboral, Antioquia. El mayor general, Juan Carlos Ramírez Trujillo, comandante de la séptima división del Ejército, reportó este fuerte golpe a la estructura delincuencial 'Los Chatas'.
"En Carmen de Viboral, Antioquia, fue desmantelado un laboratorio de droga, perteneciente a Los Chatas, al servicio de grupos armados organizados", informó el funcionario a través de su cuenta de Twitter.
De acuerdo con la información que brindó el mayor general Trujillo, este laboratorio producía cerca de media tonelada de estupefacientes mensuales.
"Esta es una operación que se hace coordinada con la Policía Nacional y gracias a la red de información. El grupo delincuencial organizado 'Los Chatas' era el encargado de este laboratorio de clorhidrato de cocaína, que fue ubicado, incautado y destruido en la vereda Vallejuelito del municipio de Carmen de Viboral", explicó el comandante de la séptima división del Ejército Nacional.
Así mismo, señaló que este laboratorio de cocaína en el Carmen de Viboral, estaba produciendo un daño ambiental debido a la tala de árboles para ubicar la infraestructura y el vertimiento de químicos a las fuentes hídricas.
En el lugar se destruyeron cuatro construcciones y se incautaron 2.325 galones de acetona, 211 galones de alcoholes primarios, 95 galones de ácido, 150 kilogramos de carbón activado, 250 kilogramos de soda cáustica, entre otros elementos para el procesamiento de la cocaína.
Además, miembros del Ejército Nacional lograron destruir 22 kilogramos de cocaína sólida y 221 kilogramos de pasta base de coca, lo que suma un total de 243 kilogramos de droga. De acuerdo con información de las autoridades, esa cantidad de alucinógenos está avaluada en más de ochocientos millones de pesos.
El mayor general Trujillo señaló que todo el laboratorio, incluyendo la droga y las construcciones, estaba avaluado en mas de 1.700 millones de pesos.
Otros golpes a los grupos armados organizados
El Ejército Nacional además reportó la desmantelación de otros seis laboratorios en zona rural de Tibú, Norte de Santander, que al parecer pertenecían al GAO-r33.
El brigadier general Marcos Evangelista Pinto explicó que dos de estas estructuras ilegales eran empleadas para elaborar permanganato de potasio y ácido clorhídrico, "laboratorios que no existían en el departamento de Norte de Santander".
Los laboratorios tenían una capacidad de producción mensual de cinco toneladas de clorhidrato de cocaína, y estaban avaluados en cerca de 8.000 millones de pesos.
