El Índice de Precios del Consumidor, IPC, que mide los precios de bienes y servicios de consumo de los colombianos, sigue subiendo. En agosto, la variación mensual de esta división fue del 1,02 %, mientras la anual se situó en 10,8 %, la más alta de las últimas décadas y que, según el DANE, se dio principalmente por las divisiones de alimentos y bebidas no alcohólicas, así como alojamiento, agua, electricidad, gas y otros combustibles.
Pero, ¿qué quiere decir lo anterior? Según Fenalco Antioquia, los colombianos han visto en sus compras, especialmente de la canasta familiar, un alto incremento en sus precios, lo cual viene afectando sus finanzas. Los mayores incrementos se dieron en productos muy cotidianos como la cebolla (11,70 %), arracacha, ñame y tubérculos (11,30 %) y azúcar (junto a otros endulzantes) con el 6,84 %.
Cabe resaltar que también hubo alimentos que presentaron disminución en sus precios como la papa (-9,31 %), la mora (-2,60 %) y la zanahoria (-1,76 %).
Aumento alarmante frente al 2021
Si se compara esta cifra con la del año anterior, en agosto, la variación anual de las subclases que más aportaron al aumento del índice en un 10,8 % fueron comidas en establecimientos de servicio a la mesa y autoservicio (16,47%), electricidad (25,90%), carne de res y derivados (26,63%), arriendo imputado (3,21%), vehículo particular nuevo o usado (16,48%), leche (38,01%), productos de limpieza y mantenimiento (29,56%), arriendo efectivo (3,26%), comidas preparadas fuera del hogar para consumo inmediato (16,51%) y transporte urbano (6,05%).
Estos incrementos afectan a los ciudadanos, quienes en sus actividades del día a día como salidas a comer, pago de arriendos, entre otras actividades), han tenido que disminuir sus compras o reemplazar productos por otros que no hayan aumentado su valor.
Si bien el valor que los colombianos asumieron para cubrir sus necesidades básicas aumentó casi el 11 % es importante tener en cuenta factores coyunturales externos como, por ejemplo, los precios de los fertilizantes que también están ocasionando la carestía.
¿Y en Medellín?
Según los precios de la Central Mayorista de Antioquia, alimentos como la cebolla, el ñame, arracacha (baja siembra por demoras en cosecha) y las legumbres secas (fríjoles, lentejas y garbanzos), fueron los comestibles que más subieron de precio en el país y en el departamento.
Lo anterior se da porque, por ejemplo, la cebolla de huevo se debe secar por el fuerte invierno y esto complica más el proceso, lo mismo sucede con las demás legumbres secas.
La tabla muestra cómo en el último año los precios de los alimentos de la canasta familiar en Medellín han aumentado en su mayoría más del 100 %, especialmente la carne de res con el 258 %, el fríjol con un 700 %, pescado 407 %, plátano 420 %, entre otros.