En Cajicá, Cundinamarca, se conoció un hallazgo que cambió el rumbo de las investigaciones por la desaparición de Valeria Afanador. Mientras los equipos de búsqueda rastreaban la zona del río Frío, las autoridades encontraron el cuerpo desmembrado de un joven, que tras varios días de análisis forenses fue identificado como Javier Mauricio García, desaparecido desde junio pasado.
El hallazgo se produjo el 22 de agosto, cuando los equipos de rescate rastreaban las riberas del río Frío con drones, buzos y unidades caninas en un intento por dar con el paradero de Valeria. En esa zona rural de Cajicá, en inmediaciones del sector conocido como El Molino, fueron halladas varias bolsas plásticas que contenían partes humanas.
Aunque en un inicio no se pudo confirmar la identidad, el Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses estableció, tras los análisis forenses, que correspondían a García, un joven de 24 años que llevaba más de dos meses desaparecido.
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¿Qué se sabe acerca de su desaparición?
Javier Mauricio había sido reportado como desaparecido el 10 de junio, fecha en la que salió de su jornada laboral en la empresa Imusa, ubicada en Capellanía. Según relató su madre, Luz Dary Pineda, el joven vestía su uniforme de trabajo, compuesto por un pantalón reflectivo, botas y un buzo, y no llevaba chaqueta. Desde aquella noche no regresó a casa ni se volvió a tener noticias de él.
La familia denunció su desaparición ante la Fiscalía, la Policía Metropolitana de Bogotá y el CTI de Chía, pero durante semanas no obtuvieron respuestas ni pistas concretas. La madre insistió en que la incertidumbre era cada vez más dolorosa, pues no había rastro alguno de su hijo. Todo cambió cuando, en medio de la búsqueda de Valeria, Medicina Legal la contactó para iniciar el proceso de reconocimiento de un cuerpo hallado en condiciones violentas.
Lo que más ha conmocionó a la comunidad es que el hallazgo de los restos de Javier coincidió con la desaparición de Valeria Afanador, la niña con síndrome de Down que fue vista por última vez al salir de su colegio el pasado 12 de agosto. En un principio se especuló con que la menor pudo haber caído al río, pero esta hipótesis fue descartada por las autoridades tras exhaustivas jornadas de búsqueda.
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Mientras la incertidumbre por el paradero de la niña continúa, el caso de Javier se convirtió en una tragedia confirmada. La Fiscalía informó oficialmente a la familia que el cuerpo desmembrado correspondía al joven de 24 años, y que fue hallado gracias a las labores de búsqueda adelantadas en el municipio.
El cuerpo de Javier fue encontrado con claras señales de violencia, lo que refuerza la hipótesis de un crimen atroz. Hasta ahora, no se conocen los responsables ni los móviles detrás de su asesinato y posterior desmembramiento. La Fiscalía aseguró que continuará con las investigaciones para esclarecer los hechos y dar con los culpables.
