¿Qué tan cierto es que el bostezo es contagioso?

Dom, 02/05/2021 - 12:59
Existen varias hipótesis que explican el bostezo y la razón por la que esta reacción es supuestamente contagiosa.
Créditos:
Sammy-Williams en Pixabay

Las personas bostezan múltiples veces en el día; es una reacción del cuerpo involuntaria, así no se quiera o no sea el momento para dejar salir un bostezo, es casi imposible detenerlo cuando se percibe esa sensación en toda la cavidad de la boca hasta lo oídos.

Se le llama bostezo a la acción de abrir la boca y exhalar una gran cantidad de aire, para luego exhalar de manera más suave. En ese momento, también se estiran los músculos faciales, se recarga la cabeza hacia atrás y sí es muy intenso pueden salir hasta pequeñas lágrimas de los ojos.

Los científicos llevan años trabajando para darle una explicación a este acto y han llegado a diferentes respuestas sobre por qué o para qué los humanos y algunos animales bostezan.

El profesor de fisiología en la Universidad de Lake Erie (Estados Unidos), Mark Andrews, dice que la acción de bostezar está asociada a una respuesta del cansancio o también una pista de que algo no está bien en el cuerpo.

Científicamente hablando, esta reacción se genera cuando el núcleo paraventricular detecta una deficiencia de oxígeno en la sangre, creando un reflejo físico para que el cuerpo realice una acción en la que pueda inhalar gran cantidad de aire.

Por otro lado, la Universidad de Princeton y la Universidad Albany, ambas de Estados Unidos, apoyan una teoría que asegura que el bostezo es un mecanismo de oxigenación del cerebro. Esto se debe a que el cerebro concentra hasta una tercera parte de las calorías consumidas y tiene una temperatura elevada, por lo cual necesita mayor cantidad de oxígeno.

Pero además de eso, existe otra hipótesis que propone que la acción de bostezar, funciona como un elemento de empatía y acercamiento entre diferentes individuos. A pesar de que esto no está comprobado, ha tomado bastante fuerza, sobre todo en la explicación de por qué esta reacción del cuerpo es contagiosa.

Todos en algún momento han experimentado la situación de ver a otra persona abriendo la boca para bostezar e inmediatamente percibir que también quiere hacerlo. Y no solo que quiera, sino que se contagia inevitablemente.

Es más, cuando hay una reunión de varias personas y que probablemente todos estén cerca, suele suceder que alguno de ellos bosteza y los demás, uno por uno van arremedando dicha reacción del cuerpo. De hecho, se dice que entre un 60% y 70% de las personas empiezan a bostezar si ven a alguien hacerlo primero.

Pese a que diversos análisis han arrojado que las personas mayormente empáticas suelen contagiarse más rápido del bostezo, se dice que el bostezo no necesariamente tiene que ver con el nivel de empatía de la persona, sino que también es una reacción del cerebro frente a la temperatura.

En un estudio realizado en el 2007, ingresaron a dos grupos de personas para ver un video que mostraba gente bostezando. Un grupo llevaba una bolsa de agua tibia y el otro grupo de agua fría. En el primero, solo el 9% realizó un bostezo, mientras que en el segundo el 41% de asistentes al experimento bostezaron.

Así pues, esta teoría del contagio del bostezo, se une con la anterior para explicar el fenómeno individual que habla de la oxigenación del cerebro.

No obstante, todas estas hipótesis y estudios, no han comprobado en realidad, que hace que las personas y animales bostecen o por qué es tan inevitable hacerlo cuando alguien más ya lo hizo cerca. Hay teorías muy fuertes, pero el bostezo sigue siendo un enigma para la ciencia.

Más KienyKe
'Act II: Cowboy Carter', es el disco que Beyoncé publicará este viernes y con el que entra en la música country.
En redes sociales, la polémica exparticipante compartió un mensaje que dejaría abierta una posibilidad de su regreso a 'La casa'.
El mandatario brasileño y su homólogo francés calificaron de "grave" el bloqueo de la candidatura de Corina Yoris en Venezuela.
En silla de ruedas, el Sumo Pontífice lavó los pies de las reclusas en la prisión femenina de Rebibbia en Roma.
Kien Opina