Las intoxicaciones por licor adulterado se han incrementado en estas fechas navideñas. Ante esto, la Policía Metropolitana de Bogotá anunció que, durante las labores de prevención y acción contra el delito, se incautaron 3.600 botellas que se estaban comercializando en la localidad de Los Mártires, evitando que se produjeran afectaciones a la salud de los ciudadanos.
Funcionarios del Grupo de Reacción de la Fuerza Disponible y de la Estación de Policía Mártires atendieron al llamado de un habitante, quien alertó sobre la existencia de varias botellas de dudosa procedencia en una vivienda del sector. Ante esto, los uniformados allanaron el inmueble y encontraron las 3.600 botellas, estampillas, tapas, cajas y empaques de ron, whisky, aguardiente y vino falsificadas.
Según los reportes de las autoridades, el material incautado tendría un valor aproximado de 450 millones de pesos. Por el momento, la Policía continúa con las investigaciones para dar con el paradero de los responsables de la fabricación y comercialización de estas bebidas ilegales.
Cabe recordar que, hasta el momento, se han registrado 38 intoxicaciones graves por consumo de licor adulterado, de los cuales 23 han terminado en la muerte. A raíz de esto, las autoridades han realizado 59 operativos de verificación de alimentos y bebidas sanas y seguras, durante los cuales se cerraron 28 establecimientos.
Durante las labores de investigación, inspección y vigilancia, la entidad identificó que el metanol, la sustancia química causante de las intoxicaciones, está presente en varias unidades de la marca Rey de Reyes, un licor que tiene alta demanda en Bogotá y que se comercializa fácilmente en algunos sectores.
Adicionalmente, los reportes indicaron que las afectaciones se han presentado en personas entre los 40 y 60 años y que los usuarios que se dedican a la venta informal son más propensos a consumir este tipo de bebidas ilegales, aunque toda la población debe atender a los llamados de precaución.
Estos casos, además de presentarse en cinco localidades de Bogotá, se han registrado en municipios vecinos como Soacha, donde se han encendido las alertas y se han reforzado los mecanismos de control para evitar que se comercialicen y se consuman estas sustancias.
La Secretaría le recordó a los usuarios que, aunque la realización de bebidas alcohólicas artesanales es muy común, es un delito. Solo las compañías que cuenten con autorización del Invima pueden fabricar y vender licores. Ante esto, la ciudadanía debe reportar los casos de venta y producción irregular de licor ante la línea de emergencias 123.
Si usted ha bebido alcohol y empieza a presentar síntomas como visión borrosa o ceguera, comuníquese de inmediato con las autoridades y diríjase al centro de salud más cercano, ya que podría producirse un estado de coma o incluso la muerte.
De la misma manera, la Secretaría recomendó no consumir bebidas destiladas producidas en alambiques o de otras formas artesanales y, si va a comprar en un establecimiento diferente a un supermercado de cadena desconfíe de los precios bajos. No reciba licor de personas desconocidas y evite comprar estos productos en la calle.
Una vez haya adquirido la bebida, revise detalladamente las etiquetas, los sellos de originalidad y verifique que el envase esté debidamente sellado. Una vez finalice el producto, destruya la etiqueta para evitar que la botella sea reutilizada.
