A través de una reforma discutida en el Consejo de Ministros de España se decidió reformar la ley migratoria con el fin de solventar la falta de mano de obra en algunas actividades laborales requeridas.
De esta manera, los extranjeros con dos años de residencia en el país europeo podrán acceder a una residencia y también aplicar para empleo legal.
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Los extranjeros beneficiados serán aquellos que tengan al menos dos años viviendo en España. Quienes cumplen esta condición tendrán que realizar un proceso de formación laboral para obtener un permiso de residencia por 12 meses.
A dicho beneficio accederán los extranjeros irregulares, de acuerdo a ciertas actividades en las que sea necesario un incremento de mano de obra disponible.
Además, aquellos estudiantes extranjeros podrán ser contratados formalmente en un trabajo para ejercer funciones de máximo 30 horas semanales en una compañía y podrán optar por quedarse un año más en el país luego de haber terminado sus estudios.
A su vez, el gobierno español flexibilizó las leyes para contratar a trabajadores temporales extranjeros. Con lo cual aquellos migrantes que quiera conseguir trabajo en España podrán hacerlo con más facilidad. Tendrán permiso de trabajo por nueve meses al año, con la condición de volver a su país de origen una vez al año. Esto podrá realizarse por un periodo máximo cuatro años.