Durante la madrugada de este jueves, el huracán Erick se intensificó rápidamente hasta alcanzar la categoría 4 en la escala Saffir-Simpson, lo que lo convierte en uno de los ciclones más poderosos de la temporada.
Según los reportes meteorológicos más recientes, el fenómeno ya toca tierra en las costas de los estados de Oaxaca y Guerrero, donde se mantiene activa la máxima alerta. Las autoridades locales reportan intensas tormentas, ráfagas de viento superiores a los 210 kilómetros por hora y un aumento significativo en el oleaje, lo que ha obligado a evacuar zonas costeras y suspender actividades escolares y comerciales en varias localidades.
El Servicio Meteorológico Nacional de México ha advertido sobre el alto riesgo de inundaciones repentinas, deslaves en zonas montañosas y daños estructurales por los fuertes vientos. Equipos de emergencia y protección civil se mantienen desplegados en los puntos críticos para atender posibles contingencias.
Se espera que Erick continúe su desplazamiento hacia el interior del país en las próximas horas, perdiendo fuerza gradualmente, pero aún con potencial destructivo. Las autoridades han hecho un llamado a la población para seguir las recomendaciones oficiales y mantenerse informada a través de los canales institucionales.
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