Este 24 de diciembre fue una noche buena para los funcionarios del Congreso de la República, gracias a que el Ministerio de Hacienda emitió un decreto que aumentó el salario de los secretarios, subsecretarios y directores generales, empleados administrativos del capitolio.
El decreto hace parte del plan de nivelación salarial entre los empleados del Congreso de la República, que no contempla ni a congresistas ni unidades de trabajo legislativo. Sin embargo, este es el segundo aumento decretado en el año para los mismos funcionarios, pues el presente decreto modificó el 309 de 2020, emitido en febrero, que tenía el mismo propósito.
Este nuevo decreto aumentó nuevamente la asignación básica de los empleados administrativos del capitolio nacional, con lo que los secretarios generales y directores administrativos del Senado de la República y de la Cámara de Representantes, pasarán de recibir 16.612.111 a 17.989.089 de pesos mensuales.
El decreto también estableció que los subsecretarios generales y los secretarios de las Comisiones Legales permanentes de ambas cámaras, pasarán de recibir 13.019.383 de pesos, a una asignación mensual de 14.098.560, poco más de un millón de pesos de aumento.
A ese salario se debe sumar la prima mensual que reciben los funcionarios administrativos del Legislativo, la cual también tuvo un aumento de poco menos de 200 mil pesos, con respecto a la adjudicada desde el mes de febrero.
En ese sentido, los secretarios generales de ambas corporaciones tendrán una prima mensual de 2.107.862 de pesos, lo que fija su salario mensual, con el nuevo aumento, en 20.096.951 de pesos.
Los secretarios generales y de las respectivas comisiones, tendrán una prima de 1.729.294 de pesos. Así mismo, los directores administrativos del Senado y la Cámara recibirán 1.725.445 por concepto de prima en sus asignaciones mensuales.
Justamente en las últimas semanas hubo polémica por los sueldos de los congresistas, especialmente porque el periodo sin sesiones legislativas de fin de año va hasta el 16 de marzo, tres meses en los que los parlamentarios reciben su sueldo, sin asistir a sesiones en el capitolio.
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El senador Gustavo Bolívar propuso que a los congresistas se les pague por sesión, mientras que el representante Gabriel Santos propuso recortar el tiempo de receso entre los períodos legislativos. Iniciativas que han sido rechazadas en el Congreso.
