Carta abierta al senador Cristo

En el ingrato tránsito por el sendero de las causas humanitarias en Colombia, pero apasionante desde lo profesional y sobre todo cuando se es víctima de este conflicto más vivo que nunca, es normal encontrarse con obstáculos y tropezarse con piedras que tienen alma, o mejor con seres con alma de piedra en el mejor de los escenarios. En un desafortunado “homenaje a las víctimas”, que mas bien concebimos como un insulto del Legislativo a las víctimas, ya podía ratificar que definitivamente en este país las víctimas estamos estratificadas o escalafonadas: de 1ª, 2ª, 3ª categoría y nosotros , víctimas del narcoterrorismo que no tenemos derechos en nuestro país. Hace poco fui discriminado por la Unidad para las Víctimas, al ser excluido del Registro único de Víctimas, que consagra la Ley 1448 de 2011, sobre la base de un argumento absolutamente carente de fundamento fáctico y jurídico, pues el valorador de la Subdirección de Técnica de Registro y Gestión de la Información, se basó en un recorte de El Espectador y no en los presupuestos reales del acaecimiento y jurídicos sustanciales, que dieron lugar al asesinato de mi padre a manos de las AUC de Fidel y Carlos Castaño Gil financiados por Pablo Escobar Gaviria. Pues bien al darse cuenta de este grave error la Directora de la Unidad y el propio Senador Cristo, consideraron esto como un grave error; y más aun como en palabras del congresista como “una revictimización”. Recibí directamente de la Dra. Paula Gaviria disculpas por la ligera valoración y la consecuente discriminación y todo lo que ello conllevó, pues tuve que impugnar el acto administrativo que me excluía… y acá empieza todo. Como se sabe el doctor Juan Fernando Cristo es el actual presidente del Congreso de la República. Por este motivo hace un par de meses estaba en plena campaña y por eso obviamente no tenía tiempo para perder atendiendo víctimas. Finalmente logré que su asistente me diera un espacio de 15 minutos para hablar con él. Eso fue hace 3 días; el 27 de agosto pasado (aunque el sello tiene fecha del 26-ni eso hacen bien allá-), fecha en la que cumplimos 23 años y 9 meses de impunidad en la masacre del avión de Avianca. Llegué a las 9 de la mañana y pasó lo que comparto en la carta que de mi puño y letra le dejé al senador Cristo; jamás me atendió…   Más o menos hacia las dos de la tarde, recibí una llamada del despacho del Honorable Senador Cristo. Era una de sus asistentes quien muy amablemente se disculpó en nombre del padre de la patria por la desfachatez y el desplante al haberme dejado sentado esperándolo sin ninguna atención. Me propuso una reunión con un emisario que le llevaría mi mensaje porque “él está muy ocupado”. Los políticos en ejercicio de la función pública se deben a la ciudadanía, yo entiendo los compromisos de la gente, pero también reclamo por las faltas de respeto, y esta sin duda, fue una falta de consideración y un irrespeto de parte del Dr. Cristo, para conmigo y las víctimas que represento. Senador: yo no le voy a mandar razones con nadie. Si usted considera que no merezco ser recibido por usted, eso lo respeto, pero no menosprecie los derechos de las víctimas que tanto dice reconocer, ni pase por encima de la dignidad de ellas. Espero la respuesta a la carta. Abrazo cálido. @colconmemoria presidencia@colombiaconmemoria.org