En redes sociales circulan varios videos donde dos mujeres que al parecer se encontraban robando en el centro de Cali y fueron atrapadas por la comunidad del sector, quienes comenzaron a reprocharles el acto y a agredirlas verbalmente.
Al parecer, las dos mujeres habían robado varios objetos de un centro comercial avaluados en un millón de pesos. Esto desató la furia de cientos de personas que las rodearon y comenzaron a agredirlas, algunos hombres les jalaron el cabello e incluso les quitaron sus prendas de vestir superiores.
Las presuntas ladronas la pasaron bastante mal, pues fueron golpeadas y arrastradas de brazos y piernas hasta que llegó la policía a brindarles protección y trasladarlas a una estación de policía para salvaguardar su integridad y llevarlas después a un centro asistencial. Incluso cuando la policía se las llevaba, varias personas las siguieron abucheando y lanzando objetos como botellas plásticas.
“Estas mujeres pretendieron hacer unos hurtos, la gente las golpea, les quita su ropa, gracias a la Policía las protege y fueron llevadas a la estación, pero la ciudadanía tampoco puso la denuncia entonces no fueron judicializadas”, afirmó el comandante de la Policía metropolitana de Cali, general Juan Carlos León.
Este nuevo caso de justicia por mano propia ha sido reprochado por organizaciones que velan por los derechos de la mujer. Sobre el caso, la defensora de derechos humanos y trabajadora social Mayte Misas Tique, afirmó: “ante la jauría que las despojó de sus vestimentas fueron insultadas, pero además fueron expuestas. Este hecho de violencia basada en género es terrible, es la degradación prácticamente de la sociedad, la ciudadanía debe entender que la justicia por propia mano no es el camino”.
Misas añade que la ciudad de Cali vive una crisis de inseguridad y se deben buscar estrategias para que no se siga haciendo justicia por mano propia: “Los hechos de justicia por mano propia deslegitiman el Estado. Ante un Estado Social de Derecho es importante que los gobiernos apliquen políticas públicas de seguridad y no promover violencias estructurales porque terminan empobreciendo a la ciudadanía”.